jueves, 31 de diciembre de 2009

Un día mas en el Paraiso


Nos hemos levantado temprano para ir a nadar con los tiburones y las rayas. Primero fuimos a la laguna interior y mas tarde al Lagoonarium, que es una zona acotada en la que puedes nadr con los peces. La experiencia es fantastica y aquí estan las fotogrfias que pudimos hacer. También dimos una vuelta potr mar al volcan central de BoraBora de nombre Tuamotu.

A mediodia regresamos en motora directamente al Hotel Bora Bora Lagoon Resort que esta en una isla o motu exterior.

lunes, 28 de diciembre de 2009

PARA Tí. PARAISO.





















BORA BORA
Dia 1. Dios creó el Paraíso
Dia 26 de Diciembre de 2.009: Llegamos al Edén
TOMA, TOMA , TOMA… ni en Basauri hay “bungaloús” así.






Ia Orana. Llegamos a Tahíti ya de noche al Hotel Inter Continental. La temperatura es de unos 30 ºC. Lo digo sin temor a equivocarme mucho y sin mirar el termometro; pues aquí la tempertura oscila entre los 29 y 30 grados ya sea Invierno, Verano, Noche o Día.

La luna brilla y se refleja en el mar…… No podemos contenernos y nos bañamos a las 12 de la noche de nuestro segundo 26 de Diciembre de 2.009.


No queremos molestar a nadie, ni levantar envidias en un Madrid gélido, pero esto es lo que hay. Hay otra vida y está AQUÍ.

Dia 2. BORA BORA
Segundo día en el Paraiso.
Ya empezamos a sacarle pegas al Paraíso.
En algo habremos pecado y Dios nos ha castigado con quemaduras de primer grado. Me he cortado el pie con un coral; eso sí muy bonito. Nos hemos bebido un litro de AfterSun y mañana al despuntar el alba tenemos que coger un barco para ir a la Capital, a la Isla de enfrente, a comprar más a precio de oro. Porque por cierto, los precios aquí en el Cielo están carisisímos, vamos por las nubes.
No veis como no estáis tan mal allí en el Infierno helado. Nosotros , por nuestro lado, nos conformaremos con nuestro modesto“bungaloú”, nuestra playa privada, nuestras cenazas al borde del mar y nos pincharemos de vez en cuando con algún coral puntiagudo para no abusar.
Vamos a acostarnos con el mar meciéndonos con el susurro de las olas acariciando suavemente nuestros oidos.

Día 3 en el Paraíso.

El ruido de las olas empieza a parecernos cansino......




En el Paraíso hay unos bichitos muy pequeños que no pican pero molestan. Son tan pequeños que caben por la tela mosquitera de las ventanas y acaban paseándose por todos sitios aunque lo que más les gusta son las espaldas de los seres humanos durmientes. No conseguimos clasificarlos por falta de microscopio, pero los encuadramos entre hormigas enanas, piojos sin dientes, ácaros gigantes o mosquitos sin alas.

No se por hambre o por torpeza; seguramente por las dos cosas. Hace un par de días me mordí la lengua. Yo me inclino más en que se trata de otro castigo divino por lo mucho que hablo. Bueno, las consecuencias son que eztoy zopaz y que hablo aún menos. Hemos estado en el “pueblo de una calle” que parece del Oeste pero con precios de la 5ª Avenida. Le he sacado la lengua a la farmacéutica y no le debe haber gustado porque me ha recetado un autentico y genuino cauterizador de lenguas que tengo que disciplinadamente aplicarme cuatro veces al día.

Como veis los ricos también lloran. Estamos regular, yo sigo quemada, pero no sabéis como, Hemos ido a la isla grande a comprar aftersun y por supuesto un pareo, además de un totó mas para Juan. Aquí se llaman tikis. Intentamos adaptarnos a la vida de aquí, pero no hay manera, nos hemos levantado a las 7.30 para intentar acostarnos a las 10 de la noche, hemos estado buceando y nos hemos tumbado un ratito encima de la cama y nos hemos echado una siesta de 3 horas, esta noche por lo menos hasta la 1 no nos podremos dormir
Y volvemos a empezar con el desajuste de horas. No hay manera de salirnos del horario español y llevamos ya cuatro semanas de viaje.
















NUEVA ZELANDA

AUCKLAND



En la Ciudad de los Barcos el Arbol de Navidad no podía ser de otra manera.

Auckland ha sido lo que en ciclismo se conoce como etapa de transición. Llegamos en mal momento , día de Navidad con todo cerrado. Dimos un paseo por el puerto y cogimos un ferry a Davenport. Intentamos reservar un Tour a Rotorua, la capital maorí, pero fue imposible. Decidimos entonces contratar un coche y lanzarnos a la aventura de la conducción por la izquierda. Llamamos a varias agencias y no había coches disponibles. Volvimos al Hotel y a través de Internet después de intentar en siete u ocho agencias conseguimos reservar un coche en el aeropuerto.
Segundo día: Nos hemos levantado dos horas después de lo previsto. ¡Teníamos la hora de Sydney en el despertador.¡ Llamo a la agencia y han cancelado la reserva, no por nuestra tardanza sino porque tampoco tenían coches. Ya no tenemos posibilidad de llegar a Rotorua. Lo que no hemos visitado comprendía: Reserva geotermal con piscinas de azufre y géiseres, villa maori, reserva de kiwis ( esos animalitos que son como una albondiguilla de patas cortas y pico largo que utilizan de apodo por esta tierras y , por último la practica del Zorbing.. Desesperado, amenazo con tirarme del Puente del Puerto. Atado, eso sí.
Los neocelandeses son conocidos por los deportes de riesgo, puenting, escalada de edificios…. y últimamente por el invento del Zorb.
Para los que no lo conozcan aquí les dejo unas fotografías de lo que no hicimos pero hubiésemos querido hacer.Por cierto que como casi todo el Zorbing ya lo descubrieron Tintín y el capitán Haddock en Perú hace muchos, muchos años. Me dejé en Madrid las fotografías que lo prueban pero en cuanto llegue las cuelgo.
Como alternativa cogemos un ferry a la reserva volcánica de Rangitoto y hacemos trecking hasta el cono del volcán. Con las prisas Trini se dejo las botas y tuvo que subir con chanclas. Mejor que lo cuente ella. (nada de prisas, no me dijo que íbamos a subir a un volcán y que íbamos a andar dos horas para que no protestase, y cuando me entere ya iba en el ferry camino de Rangitoto, pero subí más de la mitad por un camino de piedras volcánicas que me cortaban los pies al más mínimo descuido. Lo hubiera matao,) y menos mal que a última hora me quité una faldita porque me parecía que estaba demasiado arrugada y me puse un pantalón corto.
Ah!! Y deciros que era la 1 de la tarde con un sol y un calor de justicia. Y como único sonido : la chicharra, que solo canta cuando hace mucho, mucho calor, y con una botellita de medio litro de agua para los dos y sin comer..

Aunque hemos cumplido con lo recomendado por la guía Lonely Planet para una estancia de dos días en Auckland, nos vamos con la sensación de haber dejado muchas cosas en el tintero en un país al que es difícil llegar y aun mas difícil volver.
Escribimos sobrevolando el Pacifico en un viaje en el tiempo. Vamos al Pásado. Salimos de Auckland el día 27 de Diciembre y llegaremos a Tahití el 26 del mismo mes. Es decir, un día antes. En fin parece que perdimos el tiempo en Nueva Zelanda pero el destino nos regala un día más para compensarnos

sábado, 26 de diciembre de 2009

AUSTRALIA



SYDNEY
Abandonamos Asia con pena, y cambiamos de continente, ahora toca Oceanía, no creíamos que nos iba a gustar tanto Sydney. Cómo aquí es verano cuando llegamos y sin dormir nos fuimos a la playa de Manly, que es cómo sale en la tele, llena de surfistas rubios-as, guapos-as.
Para llegar hasta aquí hay que coger un ferry desde el que vimos por primera vez el edificio famoso de la Opera. Nos dimos nuestro primer baño en el Pacifico, un agua buenísima.
Al anochecer regresamos al puerto y estuvimos haciendo fotos alrededor de la Opera.
Al día siguiente cogimos el autobús turístico HopOn-HopOff, en castellano Jo Pon-Jo Pof. Dimos la vuelta completa y nos bajamos en la parad de Bondi Beach. La gente estaba con traje de baño y gorro de Papa Noel. Celebramos el 24 de Diciembre con otro magnifico baño en el Pacifico. La comida navideña consistió en una langosta con patatas fritas en un Fish & Chips en Plato de cartón, de dudoso glamour y menos sabor, tuvimos que recurrir al Ketchup para terminarla. Volvimos al Hotel, descansamos un poco y nos arreglamos para la Cena de Nochebuena en un restaurante dentro del Edificio de la Opera.

A las cuatro de la madrugada salíamos del Hotel al aeropuerto rumbo a Auckland. Al llegar allí teníamos una estupenda noticia resumida en un corto mensaje. “Volvéis a ser Tíos”. Con la alegría de la buena nueva llegamos a Nueva Zelanda.

Estamos en las Antípodas. Donde el agua gira al contrario en los sumideros y donde el rayado en el interior de las armas se hace al contrario para mejorar la precisión del disparo. Ello debido a los efectos de la aceleración de Coriolis, que hace que aquí todo vaya en sentido antihorario o levógiro. Estos fenómenos no nos han dificultado en absoluto nuestro devenir diario. Lo que si hemos notado es los efectos de andar cabeza abajo. A mi me ha subido la presión sanguínea y se me hinchado una vena en la frente y se me ha agudizado el mal humor. Otros efectos científicos extraños a estudiar han sido el bronceado instantáneo a manchurrones. Como si aquí el sol destiñera…
Amanece muy temprano. La gente madruga muchísimo. A las cinco de la tarde suspenden la actividad. Debe ser que están agotados después de un día tan largo. En eta época del año mas de 14 horas y media de luz. A nosotros que, las cosas como son, nos cuesta madrugar y mas en vacaciones, nos esta costando acoplarnos al horario. Vamos a remolque. Cuando terminamos de desayunar, empiezan a comer, cuando terminamos de comer, empiezan a cenar, cuando queremos aprovechar las últimas horas de luz del día desaparecen y nos cierran todo.

TAILANDIA







BANGKOK

Hola ya estamos aquí de nuevo. No hemos podido escribir antes porque tenemos muchas cosas que ver y el poco tiempo que tenemos libre hay que descansar, madrugamos mucho, bueno no tanto como los demás guiris pero bastante. Bangkok es una ciudad que me ha gustado muchísimo. Tiene una parte antigua donde están los templos y luego la parte moderna con hoteles y edificios supermodernos, comunicado todo por el río que atraviesa la ciudad. La primera tarde, llegamos corriendo al Gran Palacio que estaba a punto de cerrar. Íbamos con tanta prisa que ya saliendo nos dimos cuenta que no habiamos visto el famoso Buda Esmeralda. Tuvimos que reentrar y verlo a la carrera. Después cogimos un ferry para cruzar al otro lado del río al templo Wat Arum. Ya de noche cogimos otro ferry, a reventar de gente, y cambiamos al tren aéreo y visitamos el mercado nocturno de PatPong y el bazar. En una tienda lateral del mercado descubrimos unas figuras reproduciendo Lamas absolutamente realistas.
La expresión de la cara, las arrugas, venas , manchas en la piel por la edad…todo con un detalle asombroso. Se me antojaron inmediatamente pero luego temí que fuesen figuras hechas en serie por alguna casa de juguetes tipo Matel y no me decidí a comprar ninguna.
El hotel Aurum the River Place, estaba justo en la orilla del río, en la parte de los templos, era muy agradable solo tenía 9 habitaciones y desayunábamos en un jardincito viendo pasar los barcos. Bangkok como todas las ciudades asiáticas hace la vida en la calle, está lleno de mercaditos de todo tipo de cosas, vayas por donde vayas.El segundo día en Bangkok hicimos una excursión a las ruinas de Ayutahaya, que esta a unos 75 km y a la que se llega por unas autovías excelentes. Las ruinas son impresionantes, fruto del abandono y la reutilización de materiales al trasladar la capital a Bangkok.
Vimos varios templos y varios budas, a destacar el Buda echado la Siesta, que nos pareció como mas nuestro. A la vuelta comimos en un restaurante especializado en carnes al estilo americano. Me tome un T-Bone que me supo a gloria.
Por la noche en el Hotel busqué los Lamas en Internet y no encontré nada parecido. Al día siguiente, antes de coger el avión corrimos al mercado a por uno y encontramos la tienda cerrada. Preguntamos en la de al lado y nos dijeron que habría a las 6 de la tarde , hora en que estaríamos volando hacia Sidney. Tambien nos dijeron que,a veces el tendero se daba una vuelta a la una del mediodía hora a la que teníamos que volver al Hotel para llegar al Aeropuerto a tiempo. Aprovechamos la hora que teníamos para darnos unos masajes de pies fantásticos. Volvimos a la tienda y seguía cerrada. Nos apresurábamos a salir del Mercado, cuando oímos un grito a nuestras espaldas. Acababa de aparecer el tendero. El proceso de compra y envoltorio del lama nos llevó media hora. Después nos dio miedo coger un taxi para volver al Hotel por el atasco que había. Cogimos el tren aéreo hasta el río y de allí contratamos una barca rápida hasta el Hotel para poder llegar a tiempo a la cita con el taxista que nos llevaba al aeropuerto.
Ahora tenemos al Buda de los Grandes Viajes y al Lama acompañándonos por lo que pueda pasar.

lunes, 21 de diciembre de 2009

VIETNAM BAHIA DE HALONG






VIETNAM BAHIA DE HA-LONG

Llegamos a Vietnam directamente desde Bangkok, pensando que aquí el clima sería parecido, dejamos las maletas en el hotel de Bangkok porque volvemos allí hoy, después de día y medio, cual sería nuestra sorpresa cuando salimos del aeropuerto y hacía bastante fresquito, menos mal que se nos había ocurrido traer un forro polar por si refrescaba en el barco.
Bueno después de esto os diré que Hanoi es una ciudad tomada por los coches y las motos, estas sobre todo. En la parte antigua donde estaba nuestro hotel, muy bueno, por cierto y muy bien de precio, todo eran tiendas y puestos de comida, juguetes, adornos navideños… las motos aparcan en las aceras de manera que tu tienes que ir jugándote la vida por el asfalto, porque hay millones de motos. Es una ciudad con mucha vida, viven en la calle, comen en las puertas de sus casas con un hornillo, creo que solo entran en casa para dormir.
Después de cuatro horas, con paradita en tienda incluida, llegamos con nuestro guía y nuestro conductor a Halong Bay, estaba nublado pero es impresionante ver todos los barquitos de madera, preparados para salir de excursión con los turistas, Juan alquiló uno para nosotros dos solitos, nos hicieron la comida, nos trataron fenomenal. El recorrido es impresionante, yo iba que me creía Catherine Deneuve en “Indochina”. No puedo explicaros como es sin caer en la cursilería, sólo os digo que es de una belleza y una tranquilidad que no he experimentado hasta ahora, bueno quizá en el Tíbet. Bueno después de tanta belleza otra vez al coche y otra cuatro horas de trafico y locura hasta Hanoi, y se acabó la tranquilidad, llegamos agotados salimos a cenar, lo bueno que tiene una ciudad con tanta vida es que a las nueve te dan de cenar o incluso más tarde, y eso para un español es muy agradable porque en otros países a partir de las ocho ya no te dan nada, bueno aquí cenamos en un restaurante recomendado, buenísimo por 12 euros., que son 350.000 dongs. Os diré que 75 euros son 2.000.000 dongs, imaginaros cuando llegamos y fuimos a un cajero a sacar dinero. El tema del dinero es bastante complicado, por lo menos para nosotros, nos pasamos el día haciendo cuentas. Bueno ahora estamos volviendo a Bangkok a los 30º a las chanclas y a las bermudas y empezamos el veranito
¡!Qué gusto ¡! Y así hasta Cuzco.

jueves, 17 de diciembre de 2009

KYOTO-TOKYO

La visita a Japón ha sido relámpago, dos días , uno para Kioto y otro para Tokio. Kioto es una ciudad que guarda todavía mucho encanto. Visitamos cuatro templos a cuál más bonitos.Estuvimos en el bosque de bambú de Anashiyama. Cenamos en un japonés del barrio de las geishas (Gion) atendidos por japonesitas con kimonos, y al salir vimos cuatro geishas de verdad con maquillaje blanco y todo, impresiona un poco verlas con sus kimonos, chanclitas, sus flores…Nos dijeron que no era fácil verlas.
El tema de trenes y metro es bastante complicado, sobre todo sacar los tickets, porque según donde vayas tienes que pagar una cantidad distinta, y es un lío tremendo.

Tokio es una ciudad mucho más grande y más impersonal llena de tiendas y de gente.
Visitamos los jardines del emperador, que cómo todos los jardines de China y Japón
Habrá que verlos en primavera, porque tienen que ser espectaculares.


Cruzamos por el famoso paso de cebra en diagonal de “LOST IN TRASLATION” en Shibuya y nos dimos una vuelta por Akihabara (barrio de la electrónica).Después estuvimos en el
observatorio de Ropongi viendo cómo se iban encendiendo las luces de Tokio, y viendo desde arriba la torre Eiffel roja japonesa. A las seis de la tarde ya no podíamos más y nos fuimos al hotel. El Monterrey Hanzomon que esta bien y sobre todo enfrente de una parada de metro. No sé si os he dicho que es la ciudad más cara donde hemos estado.
Otra cosa que me ha sorprendido mucho en China y en Japón es que todos van con mascarillas y sobre todo el gran mercado que hay, tienen puestos y tiendas especializadas, con todo tipo de diseños y dibujos, con lo que gustan aquí las marcas pronto las tienen de gucci. Armani y sobre todo de vuiton que es el que más les gusta.
Es bastante llamativo lo serviciales que son, en el hotel de Kioto que era elegantón no me dejaban ni cargar con mi bolso y si no te hacían tres o cuatro saludos de cabeza doblando la espalda no se iban, ah! Y no admiten propinas en ningún sitio, y esto es comodíííísimo.
Bueno os diré que no he podido comprar ni una camiseta, ni en el aeropuerto hemos tenido tiempo. ¡!!QUE ESTRÉS!!!