LLEGADA A JAPON.
Salimos del Hotel de Pekin a la 4.00 de la madrugrada. Dormimos como podemos en el avión y seguimos dormitando en le tren bala que nos trae e Kyoto. Preguntamos cada tres pasos pues la señaización es complejisima. Cogemos el tren Narita Express desde le aeropùerto a la estación Central de Tokio. Al llegar somos los unicos que nos bajamos aquí. esperabamos una estación monumental y estamos en el apeadero de la estación mas cochambrosa de Madrid. Mosqueados, preguntamos tres veces y tres veces nos contestan que estamos en Tokyo Central. Hasta que no vemos el vestibulo de la estación no nos lo creemos. Hay un tren que sale para Kyoto en veinte minutos pero hemos tardado mas de ese tiempo en reconocer que estabamos en Kyoto Estación asi es saco un billete para tres trenes mas tarde con un margen de 40 minutos. En 10 estamos en el anden lamentando no haber sacado billete para el primer trén.
Llegamos a Kyoto y seguimos desorientados . Pese a que el Hotel está en la propia estación nos cuesta encontrarlo.
En el País de la Electrónica , nos sorprende el retrete del hotel. Un artilugio lleno de botones con “reposanalgas” climatizado y chorro de limpieza a modo de fuentecilla., reconozco que es el primer símbolo japonés que interpreto a la primera. Especial atención merece la función OSCILATING. o puedo dejar de pensar en aquel dibujo que haciamos de niños al modo manga minimalista. ¿ Que és?




" Un señor que ha perdido la pastilla de jabón en la bañera."

Cenamos en un restaurante tradicional con su tatami y sus camareras con kimono. En pleno barrio de Gion donde nos cruzamos con varias Gheisas o sus aprendices llamadas Maikos.
Cenamos muy bien y volvemos al Hotel.